Soneto del amor que se aleja

Abrasa, llama de mi viva muerte,
cada latido en mi alma desangrada,
cuando la vela de amor ,derramada,
en vano, arde por el deseo de verte.

Grita, en mi álgido desierto, quererte,
cada eco de angustia desdibujada
que me deja la pena enajenada
en la soledad del miedo a perderte.

Pero sí en la entraña del sentimiento
vive aun mi palabra en la ausencia dura
presa de la flor de tu sufrimiento,

no dejes, amor, caer en la amargura
al corazón que deshojado en tormento,
muere estando lejos de tu hermosura.