Demasiado tarde

Ya es demasiado tarde para mi

las esperanzas se desvanecen

en un cielo carmesí

Tus estrellas no quieren dormir

bajo el abrazo del atardecer

donde vivía por ti.

Hijos de la herida, ciegos de luna,

sangramos en las noches rotas

mil cristales de locura

Y ahora que te despiertas sin hora

la cicatriz repite con ternura

testiga de la misma amargura

que nunca veremos la aurora

Ya es demasiado tarde para mi

tu recuerdo para siempre

en mi eterno morir